ENTREVISTA A GUSTAVO CABULLO
27.04.2017 15:49
BOLETÍN 2017A/184 UACJ.-
Con la entrevista titulada “Periodismo secuestrado” en la que aborda el caso de un reportero desplazado por el narcotráfico, Gustavo Cabullo Madrid fue declarado ganador del Premio Nacional Veritas in Verbis que organiza el Foro Nacional de Periodistas y Comunicadores.
Con una trayectoria de 12 años en el periodismo, Cabullo Madrid obtuvo con el mismo trabajo periodístico el premio estatal que otorga el Foro de Periodistas de Chihuahua, además del premio nacional del Foro Nacional de Periodistas y Comunicadores.
La entrevista “Periodismo secuestrado” fue publicada en la revista Net, en la cual colaboró varios años, primero como reportero de investigación y luego como editor.
Originario de esta frontera, el periodista galardonado colabora actualmente en el canal de televisión de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (UACJ-TV), particularmente en el programa Forma y Fondo, junto con Erick Arenas.
Me gusta contar historias, dice Cabullo Madrid cuando habla acerca de esta entrevista al periodista Luis Cardona, quien en 2012 fue secuestrado y torturado por un grupo de narcotraficantes en Nuevo Casas Grandes.
Sus captores lo dieron por muerto y luego él tuvo que abandonar el estado por su seguridad. Sin embargo, aclara Cabullo Madrid, el trabajo que ganó el premio nacional no es sobre el secuestro, sino lo que a él lo motivó a buscar a Luis Cardona para entrevistarlo fue el hecho de querer saber sobre la vida de este reportero, que había detrás o más allá de la vida de un periodista que arriesga su vida por un medio que es muchas veces ingrato.
Del secuestro la gente podía saber a través del documental animado “Yo soy el número 16”, lo que a Cabullo Madrid le interesaba mostrar en la entrevista era la vida del reportero al que su trabajo lo llevó a perder a su familia y él mismo estuvo a punto de morir y pese a todo dice que vale la pena hacer periodismo de investigación.
Describió Cabullo como hizo contacto con Luis Cardona para realizar la entrevista por la que ganó el premio estatal de periodismo y que este galardón lo llevó a participar en la primera edición del concurso que organiza el Foro Nacional de Periodistas y Comunicadores.
Pero estos no son los únicos premios que ha obtenido Gustavo Cabullo por su trabajo como periodista. En 2010 ganó también un premio nacional de periodismo por un reportaje sobre migrantes indocumentados que fue titulador “Arizona, cuna de odio y segregación” en la que muestra la vida que llevan los inmigrantes en el territorio norteamericano.
Obtuvo también premios en el concurso que organiza cada año la Asociación de Periodistas de Ciudad Juárez. Recibió una Columna de Plata por un reportaje sobre Puerto Palomas de Villa, que a consecuencia del narcotráfico que se asentó hace unos años en ese punto fronterizo se convirtió en un pueblo abandonado.
Después concursó con dos trabajos, en los géneros de entrevista y reportaje y obtuvo dos columnas de plata. La entrevista fue a un ex militar secuestrado por gente de “El Chapo”. Sin embargo, dice, el mejor premio es cuando una persona se acerca y te felicita por una nota o un reportaje.
Cabullo Madrid habló sobre su trayectoria en el periodismo luego de haber egresado de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Autónoma de Chihuahua en esta ciudad y dijo que se inició en el Diario de Juárez en donde estuvo una corta temporada mientras obtenía sus documentos para poder laborar en el Diario de El Paso, cuando este se inició en la ciudad texana.
Cuando laboraba en el Diario cursó una maestría en la Universidad de Texas en El Paso y luego de unos años se incorporó a Revista Net como reportero de investigación, lo que le permitió viajar por todo el estado de Chihuahua y también por países de Europa.
Dijo que como reportero nunca se ha casado con las fuentes ya establecidas en los mismos medios que pueden llegar a limitar la creatividad del periodista. A mí me gusta, afirma, contar historias que el reportero de la nota dura no escribe.
“Me gusta el periodismo que despierta la emoción del lector, el tipo de periodismo que deja en el lector una lección de vida que alguien más nos comparte”, expresa.